La cocción al vapor consiste en cocer los alimentos utilizando el vapor que genera un líquido en ebullición. Al ser una cocción muy rápida y no entrar en contacto el producto con el líquido, se conservan la mayoría de las propiedades organolépticas del alimento (sabor, aroma y textura) a la vez que se preserva bastante el contenido nutricional.

Existen muchísimos utensilios específicos para cocer al vapor, aunque la forma más sencilla es tener en casa un cazo, un colador y una tapa o plato.

Pasos a seguir:

• Elegir siempre productos frescos. Limpiar y cortar los ingredientes a utilizar. Cuanto más pequeños menor será el tiempo de cocción y cortarlos en trozos iguales hará que se cocinen al mismo tiempo.
  
• Poner a hervir un cazo con dos o tres dedos de agua. Puede ser agua sola, aromatizada con especias o hierbas aromáticas, caldo (de carne, pescado, verduras).
  
• Colocar un colador (o cualquier otro utensilio para cocer) del mismo diámetro del cazo o inferior, e introducir los alimentos. El líquido del cazo no debe tocar la base del colador.
  
• Usar una tapa, plato o cualquier otro utensilio para impedir que se escape el vapor y para que el producto se cueza correctamente. Puede ser recomendable una tapa de cristal para poder controlar mejor el cocinado de los alimentos.
  
• Cocer el tiempo necesario, según tamaño y cantidad del producto, intentando no sobre-cocer para mantener al máximo sus propiedades.
  En general:
  
  • los pescados en filetes necesitarán entre 12-15 minutos y 20 minutos si son lomos.
    
  • gambas, langostinos y cigalas solo necesitan unos 7 minutos.
    
  • las verduras como la zanahoria, cebolla, coliflor, brócoli, y calabacín, en rodajas finas o trozos pequeños, pueden estar cocinados en 10 minutos. Otras, como la patata o el pimiento, pueden necesitar más tiempo. Hay verduras como los guisantes, espárragos o champiñones que pueden cocinarse en menos de 5 minutos.
    

  Estos tiempos son aproximados y pueden servir de referencia para las primeras veces que cocinamos al vapor, hasta que encontremos el tiempo que da a los alimentos el punto que nos guste.

• Una vez cocidos los alimentos, retirar la tapa, teniendo cuidado de no quemarse con la salida del vapor y servir.